sábado, 5 de marzo de 2011

Moviecomentario - "Das Weisse Band"

Al día de la publicación de ésta entrada ya son conocidos los resultados de los Academy Awards 2011 y aún tengo pendiente publicar mis comentarios sobre las películas que ya había visto hasta el 27 de febrero de 2011, éstas son: "The Fighter", "True Grit" y "127 Hours"; además, me faltan por ver: "Winter's Bone" y "The Kids Are All Right".

Pero por el momento hago una pausa para comentar, en ésta entrada, sobre la película "El Listón Blanco", programada en cartelera de la Ciudad de México desde el viernes 24 de diciembre de 2010; su máximo galardón es la Palma de Oro del Festival de Cannes 2009, razón por la que me llamó la atención ver ésta cinta. Sin embargo -y aquí viene mi queja-, los dedos de mis manos me sobraban para contar las salas cinematográficas que la proyectaban (ni se diga las distancias que uno debía recorrer para llegar a ellas); además, otro problema que debía lidiar: la oferta limitada de horarios de proyección (y luego anda la industria cinematográfica con sus campañas de "Dile no a la Piratería"). De nueva cuenta, nos topamos con el problema de la difusión de cintas 'no comerciales'. Afortunadamente aproveché ir a la Cineteca Nacional, donde todos los martes y miércoles (como el pasado 2 de marzo de 2011) cobran $25.00 MxN, aunque solo estaba programado a las 16:00 hrs.

Debo aceptar que tenía otras expectativas sobre la película, pero, ¿cómo no tenerlas
... si estoy acostumbrado a ver siempre cine hollywoodense?,
... si no había visto otras obras de Haneke anteriormente?. Sin embargo, no me lleve decepción alguna después de haberla visto. Fue gratificante para deleitar al ojo, pero sobre todo ¡me puso a pensar!

Para empezar, hay que considerar que la historia se desarrolla, considerando los sucesos comentados al final de la película, en la segunda década del Siglo XX (1914), en una pequeño pueblo rural (donde en sí la vida es menos acelerada y tediosa que en los centros urbanos). Por otra parte, hay que considerar que la historia es contada por un anciano (en edades cuando el ser humano no cuenta con demasiada lucidez). La suma de éstos dos factores es la razón por la que considero el ritmo 'lento' con el que fluye la historia, pero la forma de hablar del narrador es amena al ser escuchada -aunque, yo como espectador, no hable y ni entienda la lengua alemana-; a mi parecer emana una sensación pacífica, fraterna, sincera y quizá una dosis de ternura. Éste factor sirve de contrapeso para el contenido 'violento' de la película.

Como toda obra del género dramático quise distinguir al protagonista de la historia, sus problemas a superar y al antagonista; ¡qué error cometí!. En la historia entran a escena demasiados personajes que en ocasiones me llegué a confundir. Se encuentra el doctor, sus dos hijos y la niñera (con un hijo con síndrome de Down); el pastor, su esposa e hijos; el duque, su esposa e hijos; un campesino y su familia; y, el profesor, así como la damisela que pretendía conquistar. Prácticamente todos los personajes aportan 'su granito de arena' para enriquecer la historia.

Debo comentar que Michael Haneke estudió filosofía y psicología y usa al cine, como un medio de comunicación para dar a conocer su visión sobre los problemas que aqueja a la sociedad moderna, de forma artística; no está de acuerdo en que se ofrezca al público cine de entretenimiento que sean fácilmente digeridas; para él, el cine es un arte que hará al espectador pensar y formular interrogantes; para Haneke, una misma película será vista, por cada persona que la vea, de distintas formas.

Procederé entonces a expresar, por éste medio, mi forma de ver "El Listón Blanco". Para empezar, el título de la película hace referencia al listón blanco que portan los hijos del pastor de la población, el cual representa símbolo de inocencia, pero, ¿qué es la inocencia?. Por definición, la inocencia es: 1) estado del alma limpia de culpa; 2) carencia de culpabilidad con respecto a cualquier clase de crímen, de pecado o de una mala acción; 3) ingenuidad, falta de malicia. Los hijos del pastor portaban ese símbolo, no porque fueran  unas 'santas palomitas blancas', sino para exponerlos ante la gente que los rodeaban para hacerles de su conocimiento que estaban sometidos a un castigo por haber cometido una falta -la cual no recuerdo bien cuál fue (¡vaya que ando pésimo con mi memoria!, jajaja)-, el castigo les hará pasar vergüenza ante sus semejantes, por lo que se pensaría que por ello evitarían cometer alguna otra falta que los haría pasar por esa experiencia no grata; de aquí lanzo la primera interrogante ¿es acaso el pastor una persona libre de pecado para 'lanzar la primera piedra'?

La pequeña población rural cuenta con dos símbolos de autoridad: la social (en la figura del Duque, o más bien capataz) y la espiritual (en la imagen del pastor); los cuales emplean la técnica de infundir miedo en las personas que tienen a su cargo para poderlas controlar. El Duque, al saber de la necesidad del trabajo de los pobladores para vivir -aunque sea modesta, pero- honradamente, es capaz de no darle tierra a todo aquel campesino que no siga su línea. El pastor, aunque profese y difunda la palabra de Dios ante la población, hará uso de la violencia física como un modo correctivo para 'su rebaño'. Ambos personajes se ganan el respeto de la población, pero no por simpatía o por obrar desinteresadamente por el bien de todos, sino por uno impuesto 'a la fuerza', de aquel que genera molestia, antipatía y rencores.

Con ese yugo al que está sometido el pueblo, es difícil encontrar a un personaje que muestre una sonrisa sincera, aquella que emane de los sentimiento del amor o de la felicidad. El único estado de felicidad es gracias al festín que reciben al finalizar una temporada de abundante cosecha, pero es una felicidad que obtienen debido al estado de ebriedad, la cual también se basa en maltratar, física y verbalmente, a la servidumbre -a su prójimo ó a su semejante-, la cuál es momentánea, es efímera... la denominaría como una felicidad artificial.

Un pueblo oprimido, sin libertades de expresión, sometido a las exigencias de 'sus líderes', provocará que su gente guarde sentimientos negativos los cuales canaliza hacia sus semejantes. De aquí es donde emanan los actos violentos del que hago referencia en el 4to párrafo, y esos son: La caída provocada del doctor quien montaba a caballo (por lujuria, sexo sin amor), el mortal accidente de la esposa del campesino, las torturas del hijo del duque y del hijo de la niñera (por envidia, tanto por lo material como por la felicidad ingenua); pero, la mayoría de los actos violentos son producto de la ira que se presenta en la forma de: las hortalizas arruinadas del Duque, los golpes que el pastor o el administrador dan a sus hijos como excusa de castigo.

Bien dijo el personaje de Yoda al niño Anakin Skywalker, en la película de Star Wars: The Phantom Manace (1999): "Everything! The Fear is the path to the Dark Side. Fear leads to Anger. Anger leads to Hate. Hate leads to Suffering. I sense much Fear in you."

Esas palabras encajan en mi forma de ver al pueblo rural... y ahora, pensándolo bien, el pueblito rural es en sí el protagonista de la película donde todos sus habitantes son utilizados para reflejar el problema que les aflige. El narrador de la película es en sí un personaje del reparto que osa recordar los sucesos para encontrar el por qué de la súbita presencia de extraños accidentes que vivió ese pueblito y que lo cambió para siempre; es el personaje que me causa curiosidad por no estar sometido por ninguno de los dos líderes y difiere a los demás habitantes por buscar él la felicidad de una forma en que no afecte a terceros de forma violenta.

A casi 100 años del tiempo en que se desarrolla la historia de ésta película, muchas cosas podremos ver a nuestro alrededor que no han cambiado. Quizá causará risa en las generaciones actuales que tocar piano ó flauta eran las distracciones en lugar de husmear y escribir banalidades en facebook; que tomar la única bicicleta del pueblo sería como usar el único acceso a internet disponible en la calle. Pero a 100 años de distancia, la naturaleza del ser humano no cambia. Hoy en día podemos ver una revolución social en los pueblos musulmanes que se encuentran al norte del continente africano, que pidiendo libertad de expresión, el retiro de la tiranía de las dictaduras y cansados de las diferencias socio-económicas se desatan en actos violentos.  El pueblito rural de la película va canalizando sus frustraciones por medio de actos violentos.

La esposa del duque está cansada del ambiente tan negativo que se vive en el pueblito, pero además, conoció en otras tierras el amor que no le brindaba su esposo. El profesor del pueblo buscó el amor en una jovencita sometida ante la estricta educación que su familia le imponía, como todo joven de su generación, las cuales se abochornaban por establecer contacto físico alguno.  A mí de verdad me impactó ver a jovencitos que actuaron como robots programados para solamente obedecer a sus padres sin protestar, sin cuestionar o sin dudar de la palabra de sus padres.  Ese hecho no le veo hoy en día en mis sobrinos, cuando aún recuerdo como nos educaron a mis primos y a mí -no en un ambiente tan hostil como en la película, pero sin con algunos golpes que aún mi inconsciente lo tiene traumado-. Esa escena en que parece que al espectador le pintan una línea que no debe rebasar dentro de la casa del pastor refleja la maestría con que cuenta la historia su director, pero sobre todo que hace partícipe a quien ve la película... dan ganas de participar, dan ganas de evitar que el padre golpeé a sus hijos... como de decirle al hijo que no vaya por la vara a sabiendas que sabe él que lo van a castigar... y que te cierran la puerta para que no lo hagas... esos son el tipo de escenas por las que vale la película.

A final de cuentas, el ser humano es un ente orgánico que cuenta con alma, raciocinio y sentimientos... todo elemento de su medio exterior moldeará e influirá en su forma de ser. Todos los habitantes de ese pueblito rural han ido infectados de un mal psicológico cuyos líderes no son capaces de reconocer; si el líder no es capaz de reconocer los cambios del medio exterior que les afectan, difícilmente podrán salir avante de ellos... eso los convierte en cómplices de los actos violentos que comentan sus semejantes. Si el pastor no reconoce la inocencia que expresa su hijo más pequeño, aprende de él y lo profesa hacia los demás, no será capaz de ayudar al prójimo para resolver su problema.

Por alguna razón ésa película ganó la categoría de Mejor Película en los European Film Awards (2009), también el Globo de Oro (2010) en el género de Mejor Película en Lengua Extranjera por encima de la francesa "Un Prophete"o fue considerada en los Academy Awards (2010) donde sucumbió ante la argentina "El Secreto de sus Ojos".

La verdad tengo en la mente varias cosas que comentar. Sin duda es una película con un contenido enriquecedor, digna para comentar e intercambiar ideas a la cual espero que le brindas una oportunidad para que la veas. Dale oportunidad a otro género de película que no sea la hollywoodense, no te arrepentirás.


Preferencia del público mexicano
Fin de semana 9 del año 2011
(del 25 al 27 de febrero)



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